Presidente Peña fortalece estrategias para aumentar la productividad agrícola con miras al Programa Hambre Cero
En ese afán, el presidente Peña impulsa acciones que lleven a los productores frutihortícolas a convertirse en proveedores del Programa Hambre Cero. Fomentando así el mejoramiento de la economía familiar y por ende de cada región.
Para ello varios desafíos en política pública deben concaretarse. Hacer adecuaciones en los procesos, estandarizar información en el MAG, que sistematice los datos sobre la producción a lo largo del año, y en todo el país. Igualmente como articular mecanismos que aseguren una provisión frutihortícola constante, atendiendo a que en el programa se dará el salto de 450.000 a 950.000 platos de comida diarios a partir del 2025.
Durante la reunión, el ministro Carlos Giménez destacó la importancia de focalizar esfuerzos en sectores productivos, asegurando que se acompañará a los mismos para optimizar el proceso de alimentación escolar. "Este año, más alumnos recibirán alimentos en las escuelas, y es fundamental que todas las instituciones trabajen de manera integrada hacia este objetivo", afirmó.
Uno de los puntos clave abordados en la reunión fue la incorporación efectiva de la agricultura familiar en el programa de alimentación escolar. Giménez mencionó que a través de ruedas de negocios organizadas por su ministerio y el Ministerio de Industria y Comercio, se busca facilitar que las organizaciones productivas puedan proveer sus materias prima a las instituciones educativas.
Giménez también se refirió a los desafíos que enfrenta la producción agrícola debido a la sequía, especialmente en regiones como San Pedro y Concepción. "Estamos implementando medidas para asistir a los pequeños productores, como la construcción de pozos y la adopción de tecnologías adecuadas para enfrentar esta situación crítica", explicó.
Finalmente, se reafirmó el compromiso del gobierno para planificar la producción agrícola, garantizando así un suministro constante y sostenible, que beneficie tanto a los estudiantes como a los productores locales. "La planificación es esencial para evitar la saturación del mercado y fomentar un entorno productivo más estable", concluyó Giménez.